GRACIAS EN DESGRACIAS

Llevo varios días queriendo encontrar un rato para escribir algo y ciertamente tenía muchas cosas que contar, pero la actualidad me ha quitado las ganas. No puedo menos que comentarlo, es un accidente que nos podía haber ocurrido a cualquiera. Este fin de semana 23 muertos en carretera y el lunes y para comenzar la semana, 34 en el metro de Valencia (de momento). Como siempre no cabe más que dar las gracias por no haber estado allí y a ser posible porque alguno de los que si estaban no sean conocidos o familia de ...

Es algo que me asquea, pero que es recurrente, en las desgracias siempre debemos dar gracias, gracias por poder contarlo, gracias porque podía haber sido peor, gracias porque saldremos de eso, gracias por haber pasado 1 minuto antes o después de la desgracia. Gracias desgraciadas que me asquean porque me gustaría que no hubiera que darlas nunca. La vida es así y no podemos cambiar lo imprevisible, así que ... habrá que aplicar ese concepto tan católico, que no cristiano de resignación y al menos espero que los grupos de poder (políticos, religiosos o sociales) no se aprovechen de estos hechos con fines propagandísticos.

Y a los que no pueden dar gracias: ánimo a los que se han quedado y que descansen en paz los que se han ido.

Nota.- Ya sé que me he salido algo fuera del tono habitual y que no me pega mucho comentar este tipò de acontecimientos, pero ... es lo que hay.